viernes, 2 de marzo de 2012

Debe ser primavera...

Primero fue la constitución de la asamblea local, que ya tiene página web. Luego, la organización de una “jornada de convivencia”, con chocolatada y asamblea en el IES nº 3. Más y más asambleas en los recreos, paseos tras la pancarta, ropa negra los lunes, distintivo con imperdible, y un comunicado de adhesión al manifiesto elaborado por el Luis Vives. Después,  entrevista en la Intercomarcal. Y esta semana, las clases en la Plaza de Santiago que nos han valido salir, elogiadamente, en el informativo territorial  de la Primera. Aparte de esto, asistencia a las cívicas y multitudinarias manifestaciones de Alicante y Valencia, y una concentración en Villena. Lo mejor de todo no es que el gobierno de la Comunitat acabe de hacer a los sindicatos una propuesta de negociación sobre los recortes (que bien venida sea). Lo que más le satisface a uno es ver que cada vez es mayor el número de personas que entienden cuál es el principal motivo de este tipo de movilizaciones: la campaña de desprestigio a la que algunos/as gobernantes están sometiendo a quienes nos dedicamos a la docencia y al alumnado, así como el deterioro de la calidad de la enseñanza. Más allá de esto, lo que más me agrada y llena de ganas de hacer nuevas cosas es haber visto en semejante tipo de actos estos días muchas caras (sobre todo de jóvenes) que parecen recién despertadas, que transmiten un estado personal de compromiso, lucha por lo que se considera justo, responsabilidad con lo que se está haciendo, afán de sobreponerse a la adversidad; humanas emociones y sentimientos de unidad, dignidad, pertenencia a un muy importante colectivo social y, ante todo, ilusión: convencimiento de que se puede, si nos ponemos hombro con hombro, lograr lo imposible o, al menos, construir un mundo algo mejor.